Un instrumento fundamental para la planeación de la movilidad en el mediano plazo es la Encuesta Origen-Destino. El Área Metropolitana del Valle de Aburrá, como autoridad de transporte en la región, acaba de entregar los principales resultados de la última Encuesta, correspondiente al año 2017.

La mayoría de los resultados están en consonancia con lo evidenciado por nuestra Encuesta de Percepción Ciudadana en estos últimos años, ratificando los avances y resaltando los desafíos que tenemos por delante.

Se destaca el crecimiento en el número de viajes que realizamos a diario y un mayor porcentaje de personas que realizan viajes, pasando de 69 personas por cada 100 en 2012 a 74 por cada cien en 2017. Esto es típico de sociedades que crecen en ingresos y oportunidades, como lo demuestra que el 64% de los viajes se realicen por estudio y trabajo.

Uno de los datos más resaltados de la Encuesta ha sido el aumento en el tiempo de desplazamiento, que pasó de 25 minutos promedio en 2005 a 36 minutos en 2017. Un resultado esperable dado el aumento significativo del parque automotor, especialmente notorio para las motos. Ahora bien, llama la atención que de acuerdo con la Encuesta la hora de mayor pico en los viajes sea de las 6 a. m a las 7 a. m con el 17% de los viajes, es decir, justo antes de que empiece el pico y placa.

En reiteradas ocasiones se ha planteado que la medida del pico y placa tiene una vida útil corta y que es necesario implementar otras estrategias de gestión de la demanda como los peajes o el aumento de las zonas de parqueo público pago. Cabe preguntarse si se seguirá insistiendo en la medida cuando claramente acarrea un uso ineficiente de la malla vial o avanzaremos con soluciones de fondo.

Otro de los datos más relevantes de esta Encuesta es lo concerniente con la distribución del total de viajes por modos.  En el marco de un nuevo Plan de Ordenamiento Territorial para Medellín que promueve la inversión de la pirámide tradicional de movilidad, poniendo la prelación al peatón y la bicicleta y en segundo lugar el transporte público colectivo, los resultados de la EOD para 2017 resultan agridulces.  

De un lado, la participación de la bicicleta tuvo una variación insignificante en los últimos años, al ubicarse en un 1%, frente a un potencial aproximado del 7%. Tampoco lo hizo el viaje a pie (más de dos cuadras). La mayor reducción del total de viajes y, por tanto, de su participación modal fue para el Transporte Público Colectivo.

De otro lado, la pérdida de participación del Transporte Público Colectivo se vio compensada en parte por el crecimiento de la participación del Sistema Integrado de Transporte -SITVA-, en lo que constituye el mejor resultado de la EOD en 2017.

Lo anterior es el resultado de una inversión de recursos públicos cuantiosa para extender el SITVA, pero una capacidad más limitada para modernizar el transporte público colectivo en la región. Precisamente, otro instrumento que el Área Metropolitana desarrolló recientemente como es el de la Encuesta de Satisfacción frente a los modos de transporte públicos mostró que lo que más valoran los usuarios es la disponibilidad y los tiempos de desplazamiento. Esto evidencia el desafío mayor para el transporte público colectivo en la actualidad y es garantizar la exclusividad en las vías arterias para mejorar sus tiempos de desplazamiento promedio.