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Para cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible, ODS, los compromisos del Acuerdo de París, como los derivados del ingreso a la OCDE, Colombia debe priorizar en su agenda temas sobre biodiversidad, gestión de activos ambientales y la promoción de ciudades sostenibles.

Se ajustó la norma de calidad del aire con el apoyo del Banco Mundial y de otras entidades nacionales, para reforzar los sistemas de medición de la calidad del aire en el país, la meta de CONPES de Crecimiento Verde 3439 consolida logros del gobierno en materia ambiental con visión a 2030 que incluye en temas de Movilidad eléctrica: A 2030, 600.000 vehículos eléctricos harán parte de la flota total del país (en 2017 alcanzaban los 1.695 registrados).

En relación con la movilidad eléctrica, el Ministerio de Medio Ambiente ha creado marcos regulatorios que han permitido reducir el arancel de los vehículos eléctricos e híbridos por 10 años, e igualmente junto al Ministerio de Minas y Energía se establecieron incentivos económicos de exclusión de IVA y deducción y descuento de renta para promover la adopción de metas ambientales en el marco del Programa de Uso Racional y Eficiente de la Energía, Proure.

Los modos de transporte que se definan con participación de las partes interesadas deben dar respuesta a las problemáticas de las ciudades, para garantizar calidad de vida, equidad social, reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, lograr usos más eficientes de la energía y como consecuencia ser más competitivas. Debemos transitar hacia modos de movilidad menos dependientes de los combustibles fósiles, que utilicen fuentes de energía limpias y que incorporen nuevas soluciones y aplicaciones como el auto compartido, los cargos por congestión, así como trenes, metros y bicicletas eléctricos, en la perspectiva de lograr una movilidad sostenible y sistemática. La sostenibilidad no sólo es ecológica sino económica. Si es rentable es sostenible. 


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