​​

Cuando los animales silvestres son extraídos de su entorno y llevados a otro hábitat, se enfrentan a enfermedades, depresión e incluso la muerte.

La belleza de la fauna silvestre es innegable y en muchas ocasiones, por sus espectaculares características, nos vemos tentados a tener un espécimen de éstos en nuestros hogares. Pero, ¿qué sabemos en realidad sobre fauna silvestre? Tal vez no mucho, y por eso es necesario puntualizar que debemos entenderla como ese conjunto de organismos vivos de especies animales terrestres y acuáticas que no han sido domesticados.
 
La fauna silvestre cumple una función biológica y ecosistémica muy importante dentro de su entorno que, en últimas, garantiza nuestra supervivencia como especie. Si la depredamos de la forma en que lo estamos haciendo actualmente, se genera un círculo vicioso que promueve diversos tipos de conductas delictivas y además, provoca el rápido deterioro de los ecosistemas. Por eso, aunque es claro que la gran mayoría de las especies que son traficadas mueren en el proceso y sólo un mínimo porcentaje logra llegar al punto final de la cadena, gracias a las labores de educación y concienciación con relación a la tenencia de fauna silvestre, se observa un gran incremento de entregas voluntarias en el Centro de Atención y Valoración de la Fauna Silvestre - CAV - del Área Metropolitana del Valle de Aburrá.
 
Dichas entregas al igual que las recuperaciones de estas especies, las incautaciones realizadas por la Policía Nacional y las remisiones de otras Corporaciones autónomas regionales entran a una red de tratamiento que comienza por una atención y valoración en el CAV, un centro que funciona desde hace 16 años y cuenta con médicos veterinarios, bacteriólogos y demás personal idóneo que realizan numerosos procedimientos enfocados a determinar y mejorar el estado de salud de los animales. Después de un proceso de recuperación en el que se evalúan las condiciones físicas y psicológicas del animal, y que en muchos de los casos toma varios años, se le evalúa para determinar si es apto para ser devuelto al medio natural.

Aunque la capacidad del Centro le permite albergar unos 1.000 individuos como máximo, de acuerdo a las normas internacionales, se puede estimar que en los dos primeros años de trabajo, el CAV ha recibido y tratado cerca de 11.200 animales, entre los que se encuentran anfibios, arácnidos, aves, mamíferos, entre otros, siendo los reptiles los que más llegan al Centro con 4.516 desde el año 2016.

La experiencia acumulada  en el trabajo del CAV permite afirmar que la gran mayoría de los animales conserva su instinto de supervivencia y la conducta propia de su especie, y gracias a esa condición es posible regresarlos a su entorno. Sin embargo, aunque es una tarea importante, todo este proceso de recuperación se puede evitar preservando los hábitats naturales, ya que no sólo se protege la fauna propia de cada entorno en particular, sino que se conservan adecuadamente otros elementos generadores de vida como el agua. Para esto, el Área Metropolitana del Valle de Aburrá trabaja desde la prevención y cuenta con un equipo dedicado exclusivamente a visitar sitios públicos para concienciar a la ciudadanía sobre los perjuicios de sacar a los animales de su entorno.

Paralelo a esto, la Entidad desarrolla una serie de acciones producto de la denuncia de la ciudadanía para lograr el decomiso de fauna silvestre a los comercializadores y propietarios. Además, adelanta operativos de control en las vías de ingreso a la región, especialmente en temporada de vacaciones, época en la que se incrementa el tráfico de especies de fauna silvestre, especialmente desde la Costa Atlántica, el Eje Cafetero y Urabá.

La prevención es un trabajo en conjunto y usted puede ayudarnos apoyando las autoridades ambientales: no comercialice con fauna silvestre ni con productos derivados de ellos como pieles, aceites, carne, entre otros. En nuestras manos está demás si por alguna razón usted tiene en su poder un animal de fauna silvestre y desea entregarlo, el Área se lo recibe, puede llamar a 3856000 ext. 127 y anunciar su entrega voluntaria.

​​