SITVA
El Metro:
tenemos en el Valle de Aburrá 31,3 kilómetros de metro que mueve 800.000 personas diarias a una velocidad promedio de 37 km/h. El metro inició su operación en 1995, hoy cuenta con dos líneas, 27 paradas y una flota de 80 unidades de tren. El sistema ha cambiado la vida a muchos, pues le da tiempo y calidad de vida a los usuarios.
Los Cables:
las líneas de cables se extienden para subir las laderas de Medellín y uno de ellos se prolonga para llevarnos en plan turístico hasta el Parque Arví. En total son 12,6 km de cables comerciales repartidos en cinco líneas y una flota de 326 telecabinas. El primer cable de la ciudad fue puesto en servicio en el 2004, hoy es frecuente ver a muchos turistas que viven el viaje por el sistema de cables como todo un plan.
El Tranvía:
inició su operación en el 2016, presta servicio con una línea exclusiva de 4,3 km y nueve paradas recorrida por una flota conformada por doce tranvías. El acompañamiento social en su fase de construcción permitió convertir el corredor del tranvía en galería urbana, un recorrido con memoria que permite hoy ver además del paisaje de la ladera oriental, los murales y la gastronomía local.
El Metroplús:
tres líneas que suman 27 km de recorrido, atendidas por una flota de 31 buses articulados y 57 padrones. Desde el inicio de su operación en el 2011, ha sido evidente la eficiencia de los viajes del Metroplús por los carriles exclusivos y la próxima conexión con los sistemas de Envigado e Itagüí son un paso más hacia la completa integración del sistema.
Buses alimentadores y rutas integradas:
organizados por cuencas completan el sistema que entiende cómo se mueve la gente en el Valle de Aburrá y facilita sus desplazamientos en términos tarifarios y de eficiencia. Se tienen 33 servicios operados por una flota de 370 vehículos.