La propuesta de los recorridos permite que sean cambiantes desde su contenido y forma de transmitir y construir conocimiento y reflexión, tanto desde lo contextual y lo conceptual, con referencia a la conservación ambiental en el contexto urbano, el valor de las áreas protegidas y otros ecosistemas estratégicos presentes en el territorio. Es importante considerar los saberes, experiencias y capacidad de lectura de las personas que participan en cada recorrido interpretativo, para facilitar el intercambio de conocimiento y la generación de interpretaciones del ciudadano frente a la situación ambiental que presenta el valle de Aburrá.
La realización de los recorridos interpretativos brindan un elemento diferenciador desde su intención por la activación de los sentidos: el oído, el tacto, el olfato, la vista y el gusto, ya que los espacios referenciados en cada área protegida permiten el reconocimiento del potencial natural y físico, además de su valoración a través de la observación, la sensibilidad y la investigación en campo.
