Para el Secretario de Movilidad de Medellín, son muy importantes los pasos agigantados que la ciudad da para proteger al  peatón con iniciativas como las redes camineras, el urbanismo táctico y la cicloinfraestructura. Para el funcionario, este es un avance decidido para que el peatón se apropie del espacio público y demuestre que ese es el camino que se   sigue con el POT de 2014 y se adopte de una planificación urbana de la ciudad acorde con una de la movilidad.

El secretario de Movilidad de Medellín, Humberto Iglesias Gómez, está convencido de que el camino para mejorar la movilidad en la ciudad se basa en privilegiar los viajes en un transporte público eficiente, que cualquier persona, independiente del estrato socioeconómico, se sienta a gusto al usarlo porque es bueno, eficiente, seguro, ágil, moderno y bajarse de su vehículo particular.  

Iglesias sostiene que el crecimiento de los viajes en bicicleta, que según la Encuesta Origen y Destino de 2017, pasaron del 0,7% al 1% va en la dirección correcta y hay que crear más cultura al respecto para que se sumen más ciudadanos a la movilidad activa. Además, agrega que estrategias como los Convenios de Colaboración Empresarial y el pago unificado con Tarjeta Cívica son herramientas poderosas para mejorar la movilidad en Medellín y el Valle de Aburrá.

¿Qué le deja la Encuesta Origen y Destino a Medellín, como ciudad núcleo, para mejorar la movilidad?


Lo primero que hay que decir es que nosotros como Secretaría de Movilidad de Medellín veníamos esperando desde hace mucho esta encuesta. Todo el sector que tiene que ver con movilidad la estaba esperando con ansias porque definitivamente nos ayuda mucho en la toma de decisiones. Ahí vamos a poder saber cuál es el tiempo de desplazamiento de las personas desde su lugar de origen a su lugar de destino. Y eso no implica que solo tenga que ver con temas de congestiones. Hay un tema muy importante y es la intermodalidad que se viene presentando entre los medios de transporte y eso también nos lo viene cobrando la ciudadanía.  

Cuando una persona sale de Caldas y tiene que coger primero un bus, después el metro y más tarde el tranvía, lo que más nos solicita la gente es que le ayudemos a que los tiempos de desplazamiento puedan ser óptimos. La encuesta nos ayuda a evitar la intermodalidad en esos tiempos prolongados o evitar el trasbordo. Cada vez que hay un trasbordo la gente nos lo cobra y prefiere usar su vehículo particular y no el sistema de transporte público, por estos tiempos y los tiempos de desplazamiento.

Esto nos ayuda a entender que hay un aumento en los tiempos de desplazamiento, pero también por qué se dan los aumentos en esos tiempos. Un incremento del parque automotor, como el que se está dando en toda la región metropolitana lo que nos está conduciendo es a decir que la solución no es construir más vías ni generar más infraestructura para la movilidad, pero sí puede estar en mejorar cada vez más el sistema de transporte público. Ese SITVA que cada vez tiene una mayor preponderancia y que más se usa en la región.

En lo que nos ayuda esta encuesta es a tomar ese tipo de decisiones, a entender cómo piensan los ciudadanos para utilizar el transporte y, sobre todo, a saber muy bien desde dónde hasta dónde se mueve cada uno de los habitantes del Valle de Aburrá para tomar mejores decisiones al respecto.

Medellín, por ser la ciudad núcleo, recibe población que se desplaza diariamente por trabajo o estudio de los otros municipios. ¿Cómo lograr que las rutas de otras poblaciones no afecten esa movilidad?


Lo peor que podemos hacer nosotros como ciudad núcleo y ciudad región es cerrar fronteras. Eso en algún momento se intentó hacer en nuestra ciudad, evitar que los vehículos ingresaran desde otros municipios y eso no funcionó. Más cuando estamos viviendo en una ciudad conurbada. Lo que sí tenemos que privilegiar es cómo se alimenta el sistema núcleo de transporte público en nuestra ciudad. Cómo esas rutas de buses no necesariamente tengan que llegar al Centro, sino que puedan alimentar metroplús, que ahora con su vía central de la avenida Oriental, con un corredor verde completamente eléctrico, que recorrerá este sector sin cerrar fronteras ni evitando que otros vehículos de municipios cercanos ingresen a Medellín.

¿Cree que la planeación de la ciudad en décadas pasadas le ha jugado una mala pasada a la movilidad de Medellín?


Estoy de acuerdo con eso en un 100 por ciento. Considero que muchas veces la planificación urbana de Medellín iba por un lado y la planificación de la ciudad iba por otro totalmente distinto. Creo que el POT aprobado en 2014 da unos buenos mensajes, entre ellos que invierte la pirámide de la movilidad. Se privilegian los modos no motorizados como el peatón y la bicicleta. Desde ahí se empieza a estructurar el nuevo urbanismo de la ciudad. Es muy importante que Medellín esté dando pasos agigantados para proteger al peatón con iniciativas como las redes camineras, el urbanismo táctico y la cicloinfraestructura. Este es un avance decidido para que el peatón se apropie del espacio público y efectivamente demuestre que ese es el camino que estamos siguiendo con el POT de 2014 y se adopte de manera decidida una planificación urbana de la ciudad con una de la movilidad. Eso tiene que ser clave y eso es lo que se viene estableciendo.

Volviendo al tema de la movilidad activa, puntualmente con el transporte el bicicleta, según la Encuesta Origen y Destino los viajes en este modo de transporte subieron de un 0,7% a un 1%. ¿Cree usted que se va en la dirección correcta?


Este es un tema en el que se ha venido creando cultura. Esto no es fácil. El que se haya pasado de un 0,7% a 1% nos dice que la gente ya está entrando en una dinámica distinta, pero nosotros como Estado también tenemos que propiciar eso. Con las ciclorrutas, las redes camineras, los modos de desplazamiento que permiten que más personas usen este medio de transporte. París es una ciudad que lleva más de veinte años incentivando la cultura de la movilidad activa y hoy puede tener entre el 4% y el 5% de sus desplazamientos en este tipos de transporte. No es fácil llegar a esos niveles, no es fácil cambiar la cultura, no es fácil cambiar el chip, pero tenemos que trabajar de una manera decidida para que eso suceda. Y ya vemos que viene incrementándose, aunque no al ritmo que quisiéramos el tema de la movilidad activa. Sobre todo formando una cultura en pro de eso.

¿Cómo ve el pago unificado del transporte público colectivo con medio electrónica para mejorar la movilidad en el Valle de Aburrá?


Lo que ha pasado en los últimos años en nuestra ciudad es que se ha revolucionado el transporte público. Cada vez la experiencia del usuario es mucho mejor. Incentiva que cualquier persona, independiente del estrato socioeconómico, decida montarse al transporte público porque es bueno, eficiente, seguro, ágil, moderno y bajarse de su vehículo particular. Uno de los componentes clave para esto es la integración física y tarifaria que se ha venido presentando a través de la Tarjeta Cívica. Aquí juegan actores claves muy importantes como Área Metropolitana, Metro de Medellín y, por supuesto, nosotros como Secretaría de Movilidad con las rutas que dependen de nosotros. Hoy más de 1.000 buses en nuestra ciudad cuentan con recaudo con Cívica. Eso es privilegiar al que menos tiene para que no le cueste más movilizarse por Medellín. Una persona que está en la Comuna 13, que arranque su desplazamiento desde El Salado, ya tiene integración física y tarifaria. Se está ahorrando dinero y puede tomar metro, metroplús, los cables o el tranvía.

Ahora en junio tendremos el 100% de las rutas alimentadoras con Tarjeta Cívica y esperamos que el 75% de las rutas urbanas de la ciudad tengan este medio de pago para diciembre de 2019.

¿Cómo ve el trabajo hecho en los Convenios de Colaboración Empresarial y qué falta para que terminen de sumarse algunas rutas de Medellín que aún no hacen parte de ellos?


Cómo administración somos unos convencidos de los Convenidos de Colaboración Empresarial. Cuando el sistema se logra unir para prestar un buen servicio, los resultados son maravillosos. Ya tenemos varias experiencias en los que se han juntado los actores y está funcionando muy bien. Por supuesto que hay algunos intereses y egos que no han permitido que todas las cuencas tengan los convenios. Pero todo lo que podamos hacer como Administración Municipal en pro de este objetivo lo vamos a hacer, porque creemos que es el camino más saludable para prestar un buen servicio a las diferentes zonas de la ciudad.

¿Qué acciones se deben tomar hoy para mejorar la movilidad?


Hay que entender que la verdadera solución de fondo y de raíz, que debe tener una ciudad capital, para mejorar sus índices de movilidad no se deben encaminar a la infraestructura vial. La principal motivación que deben tener los gobernantes es privilegiar el sistema de transporte público. Privilegiar los viajes en transporte público para que cada vez más personas dejen sus vehículos particulares en sus casas. Que las calles sean óptimas para el transporte público y que esto nos permita avanzar, de manera decidida, en sistemas de transporte público consolidados.​​