Primero, quiero extenderles a todos nuestros aliados y ciudadanos metropolitanos, a todos, un saludo afectuoso y sincero de Navidad. Que la época que comienza sea realmente el tiempo para la reconciliación, el diálogo y la esperanza, sobre todo cuando se acaba de firmar un acuerdo para la terminación del conflicto con las Farc y se abre un nuevo panorama de futuro en nuestros territorios. Hoy más que nunca reafirmamos que la paz es territorial y, por ende, compromete nuestros mejores esfuerzos en la búsqueda de la equidad humana y territorial.

En este mismo espacio hemos insistido en que la ruta que guía el accionar de nuestra institución, de la mano del sector público y privado, la academia, los colectivos y la ciudadanía, debe ser el corto, mediano y largo plazo. Ya estamos trabajando de forma articulada y con el diálogo como instrumento de concertación de lo más urgente, pero sin duda, el largo plazo tiene que ser una estrategia de sostenibilidad integrada, donde todos participemos. Por eso es tan importante para nosotros la concertación y la articulación con todos los actores, incluidas las instancias departamentales, nacionales y globales, en la búsqueda del desarrollo sostenible y sustentable, de la equidad humana y territorial, de la convivencia y la paz.

Un ejemplo valioso de esa articulación del largo plazo es el que tiene que ver con el Plan Integral de Descontaminación del Valle de Aburrá . Hemos sostenido que la estrategia para lograr los objetivos debe ser integral, y no única y exclusivamente de calidad del aire, que es parte del mismo, sino que hay que extenderlo a la gestión del recurso hídrico, de los residuos sólidos, la movilidad sostenible, la planificación integral e integrada, la construcción sostenible, y los pactos por la alianza por la sostenibilidad.

Venimos avanzando en la formulación del Plan Estratégico Metropolitano de Ordenamiento Territorial​, que sin duda será nuestra hoja de ruta en la planificación por los próximos años y otro ejercicio fundamental de articulación y concertación en la toma de decisiones, porque los retos son inmensos y las oportunidades para cambiar muchas de nuestras realidades son escasas y urgentes de definir. 

No asumimos el futuro con temor, sino con profunda convicción en los resultados que se dan cuando todos trabajamos juntos por objetivos comunes. Sea esta la oportunidad para reconocer la valiosa voluntad política de los miembros de la Junta Metropolitana, de su Presidente, el alcalde de Medellín, y de todos los sectores, público y privado, en la consolidación de planes y proyectos, convenios y acuerdos, de planificación del desarrollo con equidad.

La sostenibilidad del territorio pasa por comprender cada vez más que no es posible planear el desarrollo bajo criterios de satisfacción, sino de responsabilidades compartidas en la gestión del aire, del recurso hídrico, de la movilidad, de la seguridad integral y de una cultura ciudadana capaz de transformar hábitos dañinos para nuestra supervivencia y la de nuestro entorno natural.

La salud tiene que estar en el centro de gravedad de las decisiones que tomemos como sociedad. En la más reciente reunión de la Cumbre de Cambio Climático se tomó una decisión trascendental y fue poner a conversar a los ministros de Salud y de Ambiente de los países que integran Naciones Unidas en la búsqueda de un idioma común que propenda por la salud humana y territorial. No podemos seguir hablando de sostenibilidad si cada uno de los actores comprometidos en sus principios, transitan por caminos distintos y dispersos. 

Nuestra gestión por la calidad del aire, por ejemplo, será insuficiente y poco efectiva si no logramos consolidar y obtener resultados confiables sobre los efectos de la contaminación en la salud de las personas de este Valle de Aburrá. De ahí la importancia de haber  suscrito un convenio con la Facultad de Salud Pública de la Universidad de Antioquia para el estudio epidemiológico sobre los efectos de la contaminación atmosférica en la salud de nuestros ciudadanos metropolitanos.

Vamos bien, pero necesitamos avanzar más y mejor en la ruta por la sostenibilidad. Creemos en la concertación y nuestro verbo rector es la articulación.